Bocados de realidad 4 // No soy como ellos.
Hoy se ha levantado pronto, al subir la persiana, el sol está
a la altura de sus ojos, pronto volverá a estar por encima , pero de momento,
lo tiene de frente, cara a cara, siempre le gustó esa sensación, mirar frente a
frente a otra estrella, se sintió y
vivió como una estrella.
Se afeita, rápido
pero seguro, hoy no puede permitirse ni un mínimo arañazo en su ya dañada imagen.
Se viste, elegante como siempre, ejecutivos en los pies, el Armani, estiliza su
cuerpo de horas de gimnasio, algo de gomina en el pelo, no mucha, la justa. En
el telediario de la mañana, oye que el parlamento europeo ha concedido a la PAH el galardón de Ciudadano Europeo
2013, abrumado por la noticia, se sienta a esperar en su loft de la Castellana,
ya está casi vacío, solo le queda el sillón de diseño italiano y un colchón
inflable que hoy ha hecho de cama. A las
nueve y veintitrés de la mañana suena el timbre, se levanta y va pausadamente a
abrir la puerta, ahí están las personas a las que espera, también los tiene a
la altura de sus ojos, pero la sensación es otra, no puede reprimir una mueca
de desprecio que dirige al grupo que le espera, dos policías, un cerrajero y el
representante del banco, sólo falta el representante del juzgado, que levantará acta del desahucio, vacila
durante un segundo, da un paso hacia el rellano para unirse al grupo, y con
toda la dignidad que le permite la
situación, comienza con el levantamiento del acta… En su cabeza resuena un “no soy como ellos”.
